Un día como hoy de hace un año aproximadamente retome a mis queridas chicas, esas a las que hacía tiempo no veía. No era un día especial o si lo era, volvía al trabajo, del cual hacia medio año antes me habían despedido. Durante ese tiempo me pase buscando como un gilipollas empleo. Si bien mi curriculum no acaba en la papelera inmediatamente, acabaría en los cinco minutos posteriores a mi marcha del lugar donde lo había solicitado. Lo que mas que conseguí fueron algún empleo de promoción en días sueltos y un par de maltrechas entrevistas.
Era decepcionante personalmente, haber acabado en la calle, como de costumbre, en el mismo punto que había empezado. Si es cierto que medio país, por no decir medio mundo esta en esa situación desagradable. Me esforzaba por no agobiarme, en una sociedad ya de por si agobiante cuando trabajas y mas cuando no lo haces, pues desde bien pequeño te educan para que seas productivo.
Como veia que no iba a ser productivo de una manera remunerada, me esforcé en ser productivo para mi mismo, vamos, no quedarme de brazos cruzados.
Si bien era cierto que anteriormente, mi ex novia me repetia constantemente que me centrara en una sola idea y yo no había hecho mas que saltar cual conejo blanco de un sitio para otro en mi cabeza, por lo que no me habia funcionado ni para atrás, era momento, pues de calmarme, de retomar valores y de replantearme las cosas de otro modo.
Fue por un amigo, o mas bien lo que me pregunto que las anteriormente conocidas como "LAS CHICAS DE LA TOSCANA" volvieron a mi vida: "¿Que ha sido de Paula?"
Si, ¿que era de Paula y de las otras?, ¿por que llevar un tatuaje de alguién a quien vil mente has abandonado a su suerte en el laberinto de tus pensamientos?
Era una situación difícil, pues aparte de tener el peso del trabajo, tenía un peso añadido de la soledad. Una soledad que no buscas, que la encuentras, que entra por la puerta de tu casa y se te queda a vivir como ese amigo que te dice que solo se quedara un par de días.
Entre unas cosas y otras, era insostenible. No hace falta decir que la vida del autor de historietas es una vida llena de soledades. Si alguien me pregunta que es con lo que mas pago cada línea de mis trazos, responderé que con lagrimas.
Y es así, pagaba como sigo pagando a día de hoy con lagrimas una situación que es a todas luces desagradable y aquella pregunta rondándome por la cabeza.
A veces solo hace falta la chispa adecuada para que todo arda y calcine lo que te desagrada o lo que no esperabas quitarte de en medio. Aquella pregunta significo sin esperarlo mucho mas de lo que aparentaba.
Pensé y pensé, pensaba en como retomar una idea, sin hacerla larga, sin acabar pensando en la segunda página en la temporada 5ª. No tenía que ser una gran idea, solo tenía que ser una idea sencilla.
Ese fue mi punto de partida, una idea sencilla, pero a la vez eficaz. pensé: "¿por qué no seguir la linea del jueves de hacer una página por semana?"
y fue así como inaugure y di vida a este espacio, con esa idea, tomar situaciones cotidianas de mis queridas y amadas amigas de papel y tinta. A partir de ahí trabaje nuevamente sus personalidades, pero fue mas que una previsión una fragua. No quería ponerme a pensar y a planificar todo. Decidí que todo fuera del modo mas natural. No tenía porque ser un proyecto planificado, sino tenia que ser algo divertido, espontaneo. Ya era suficiente tener que planificar cada detalle de mi propia vida hasta el milímetro como para seguir haciéndolo en un refugio interior.
Ellas me motivaron, con su regreso, y cada vez que pensaba en un guion o historia, me era como una anécdota que mis amigas, (de tenerlas en esos días) me hubieran contado.
Fue un 9 de enero de 2011, cuando anunciándome días antes que volvía al trabajo cree en mi nerviosismo estas páginas que os muestro acabadas
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